CAPÍTULO 11
Estamos en casa desde hace 150 días. Estamos cansados todos y no sabemos cuándo se termina este encierro. Estamos transitando el momento más complicado de la pandemia. Como vemos y escuchamos todos los días están aumentando el número de casos afectados y posiblemente ocurra lo mismo en las próximas semanas.
Sin embargo si vivimos en Buenos Aires las estadísticas de las últimas semanas muestran promedio de casos semejantes entre 1100 y 1200 casos por día de nuevos contagios. El 18 de junio tuvimos el primer día con 1000 casos nuevos. Esto significa que el famoso pico que esperamos, se esté aplanando.
Sólo un 17 % de las personas afectadas corresponden a personas de 60 y más años. Esta es una enfermedad muy contagiosa que afecta a los más jóvenes y produce muypoca sintomatología (podemos estar cerca de una persona aparentemente sana que puede contagiar).
En el último capítulo hablamos que hay un gran culpable de la pandemia que son las interacciones personales. Cuando uno está cumpliendo la cuarentena el principal peligro está cuando ingresan a casa y permanecen en un lugar cerrado mucho tiempo. Los principales actores:la familia y los amigos cercanos. Pero también cuando agotados por las tareas de la casa, entran personas a limpiar o a arreglar algún aparato o a cortarnos el cabello o arreglarnos las uñas. Aquí hay un problema si alguno ha sido un transgresor, que se cuidó poco, puede arriesgarnos a todo un grupo. Por eso en este momento se está poniendo el énfasis en evitar las reuniones sociales en ambientes cerrados.
Si podemos mantener la cuarentena, no salgamos salvo para hacer cosas imprescindibles.
Si estamos muy cansados de estar encerrados, y aceptamos tomar riesgos mínimos: Salir, pero tomando todas las precauciones del caso: Usar siempre el tapabocas, Mantener la distancia social (uno puede encontrase con un hijo, un nieto o un amigo en una plaza evitando los acercamientos excesivos y limitando el tiempo de compañía). Por supuesto no usar transporte público, el paseo hacerlo en la cercanía de casa, buscando espacios despoblados.
No les hago es una propuesta para arriesgarlos luego de tanto encierro, sino para darle un pequeño alivio a la situación y con esto mantener nuestra salud mental. Si esta solución no le satisface por temor, es mejor permanecer en casa y verse a través de los sistemas de videos llamadas o encuentros por zoom que también ayudan.
Aunque la epidemia empeore, no hay que rebelarse y seguir manteniendo extremos cuidados. Hay que ser solidarios, porque con el comportamiento individual de todos ayudamos a salvar vidas. La prevención es lo único que tenemos como defensa, no podemos rendirnos.
Recuerden lo que conté de un epidemiólogo de Yale “Una reunión pequeña puede hacer fracasar una estrategia pública. “A la gente le gusta hacer un poquito de trampa: una cita, un corte de pelo, una compra innecesaria. Este simple hecho desencadena una dinámica social que puede comprometer el trabajo de toda la comunidad. Este virus no perdona a quien transgrede las reglas.
Mientras tanto les recuerdo algo que le da poca importancia la prensa, un 35 % de los casos confirmados hoy están curados. Esto se ha conseguido con medidas preventivas, sin vacunas, ni medicamentos con evidencia comprobada. El resultado depende de las medidas adoptadas y también del comportamiento individual y grupal de la gente.
¿Cuáles son las estrategias individuales durante esta etapa de mayor contagio?
Los cuidados personales siguen siendo muy importantes para prevenir el contagio. No salir a la calle si no es imprescindible. Aún en nuestro propio domicilio, el contacto entre personas es inevitable, pero podemos reducir la probabilidad del contagio usando medidas de protección como los tapabocasaún en la casa, si viene gente de afuera. Si están trabajando en alguna pieza o patio, mantenerse alejados y ventilar los ambientes donde trabajó. También desinfectar las mesas o algunas herramientas o utensilios que estuvieron en contacto con la persona.
Si alguno de sus convivientes es sospechoso de portar el virus, comuníquense conmigo porque, las medidas de aislamiento personal y el tratamiento de la limpieza, son más extremas.
Espero que se encuentren bien, hayan cumplido su rutina diaria y que pronto nos podamos encontrar.
Roberto Eduardo Barca
Médico Geriatra
Director de Centro de Día.